En una época en la que la conectividad, la movilidad y la digitalización son herramientas de uso cotidiano, la competitividad de las empresas depende en gran medida, de su capacidad para tomar decisiones en el momento en que se presentan las oportunidades. Mientras que para las grandes empresas esto significa un reajuste de inversiones, para las PyMes puede significar la subsistencia en el mercado.
Las PyMes tienen ante ellas el reto de aprovechar al máximo la tecnología para competir con las empresas más grandes. Cuentan con la ventaja de no requerir grandes inversiones ni grandes equipos de trabajo, aunque sí requieren de colaboradores muy eficaces que se puedan conectar desde cualquier lugar, a través de cualquier tipo de dispositivo y en cualquier momento a las aplicaciones críticas de la empresa.
Para lograrlo, deben invertir en soluciones que les garanticen disponibilidad y respondan a los siguientes desafíos:
Tener en cuenta el coste de propiedad
Para una PyMe, el coste de la solución de disponibilidad no es el precio en sí, sino lo que se deja de ganar por no estar disponible. Por ejemplo, si se tiene una aplicación de eCommerce que permite facturar cinco mil euros por hora, una caída de esta aplicación puede costarle al menos esos cinco mil euros por hora. Otro ejemplo sería que si diez representantes de ventas hacen diez llamadas por hora y se cae el sistema: se perdería la posibilidad de contactar con 100 potenciales clientes.
El Informe de disponibilidad de Veeam demuestra que, actualmente, las empresas sufren de media de quince caídas al año con un tiempo de recuperación de tres horas para aplicaciones de misión crítica, lo que llega a costar a una empresa hasta 16 millones de dólares de media anuales.
Facilidad de uso de las soluciones
Un profesional de tecnologías de la información en la PyMe debe cumplir múltiples funciones: desde asistir a una reunión con el director general para explicar una inversión importante para el datacenter, a ayudar a un usuario a encontrar un archivo o mail que haya borrado o extraviado. Por eso, es clave asegurarse de que la solución de disponibilidad sea intuitiva y flexible en su gestión y administración.
Garantizar la recuperación de datos
Habitualmente las PyMes concentraban sus esfuerzos en los backup o respaldo, pero ahora esto ha cambiado y se trata sobre todo de garantizar la recuperación. Es cierto que estas empresas tienen menos datos que respaldar, pero también es cierto que el valor de la información es considerablemente más alto.
Las PyMes tienen mayor flexibilidad para programar sus respaldos o réplicas. Por eso el foco debe estar en la recuperación de alta velocidad y en evitar la pérdida de datos. Actualmente, el 92 % de las PyMes requieren horas para recuperar una máquina virtual (VM), lo cual contradice las expectativas del negocio de no perder ni la menor cantidad de datos, mucho menos oportunidades.
Aprovechar las ventajas que ofrece la nube
Una de las ventajas que brinda la nube a la PyMe es el bajo coste de almacenamiento y la posibilidad de extender sus capacidades de disponibilidad. Es una forma fácil de resolver problemas en torno a la disponibilidad: las PyMes no deben perder de vista una estrategia completa de recuperación. Es el caso de la nube que puede contener, a través de un proveedor de servicios, una réplica de las máquinas virtuales. El beneficio es que se puede garantizar la disponibilidad de las aplicaciones de misión crítica sin el coste de construir y mantener un sitio de disaster recovery (DR) lo que es un gran beneficio para la PyMe.
En conclusión, las empresas medianas manejan cantidades de datos enormes. El aumento de la demanda de disponibilidad significa que deben estar disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Actualmente existen soluciones de disponibilidad para entornos virtuales que satisfacen las demandas de las empresas que quieren estar permanentemente activas, especialmente para aquellas PyMes que no tienen grandes presupuestos.