Más allá de los “viejos neoficios” conocidos como son los YouTubers, los influencers o bloggers, que gozan ya de cierto respeto y reconocimiento social, es posible desvelar un nuevo mundo más allá de términos menos conocidos, pero que suponen una importante facturación en nuestro país. Hablamos de algunos ejemplos como copywriter, SEOs o afiliados.
En los últimos diez años han aparecido gran parte de las profesiones digitales que hoy conforman el panorama laboral de los “neoficios”. Y que siguen especializándose a un ritmo incesante.
El término “neoficios” tiene un significado más profundo que el simple hecho de definir las profesiones digitales. También define la forma de aprender esta actividad profesional, similar al sistema gremial de aprendizaje de hace unos siglos. Salvando las distancias guarda muchas similitudes. Existen unos maestros digitales en los “neoficios”, con los que trabajan expertos, al igual que hacían los oficiales en otro tiempo y, por supuesto, muchos son los aprendices que siguen a estos maestros, que no dejan de dar formación, gran parte gratuita, a través de sus comunidades digitales y otras de pago.
Sin embargo, los nuevos gremios formados por los “neoficios,” gozan de la formación más democratizada de toda la historia y nos abren las puertas a un nuevo paradigma educativo y laboral. Cualquiera puede elegir quién será su maestro y también cualquiera puede convertirse en un maestro, ya que es la comunidad quién le da ese reconocimiento, con su aprobación y testimonios.
Al igual que ocurría en el siglo XVI con ciertos oficios viles o mecánicos, hoy en día los “neoficios” no gozan muchas veces del respeto, reconocimiento y dignidad que merecen por parte de la población. En cierto grado es desconocimiento, ya que la gran mayoría de “neoficios” nos puede producir cierto rechazo o incomprensión. Suena utópico eso de vivir gracias a Internet, aunque ya parece que lo vamos asumiendo y quién no tiene casos de éxito más o menos cercanos.
Quizás los que más nos suenan son los YouTubers, influencers, bloggers o los “viejos conocidos” diseñadores web, aunque quizás en alguno de ellos, o en todos, nos preguntemos aún: ¿pero de dónde provienen sus ingresos exactamente? ¿Cómo desarrollan su trabajo, en qué consiste realmente? Y lo más importante ¿dónde se aprende este “neoficio”?
El abanico de profesiones y puestos de trabajo que nos brinda el mundo online es amplio. Pero ¿Son modas pasajeras o verdaderas disciplinas laborales? Algunos “neoficios” tienen ya más de una década, y cada vez son más puestos de empleo los que van diversificando el sector de las profesiones online.
A nivel mundial, sólo los 10 youTubers más seguidos facturaron en 2017 un total de 148,45 millones de euros. Su carrera es como youtubers, pero son verdaderos empresarios de los “neoficios”. La facturación de los youtuber españoles oscila entre los 100 y los 300 mil euros anuales, salvo alguna excepción que supera el millón de euros. Pero hay “neoficios” que reportan facturaciones más elevadas y con tasas de crecimiento mucho mayores a los youtubers. Negocios online que apenas tienen limitaciones de crecimiento. Suena irreal, pero gente normal está llevando a cabo proyectos de este tipo.
Otros tipos
Vamos a descubrir más tipos y a qué se dedica cada uno exactamente.
Copywriter: Significa escritor y básicamente es lo que hacen, escribir textos. La profesión en sí se caracteriza por las técnicas de escritura persuasiva y el dominio del lenguaje y de las necesidades del consumidor, para ayudar a tomar la decisión de compra o del objetivo que tenga el texto en concreto. Pueden transmitir sentimientos, hacernos soñar o desear, hurgar donde más nos duele y ponernos en el estado óptimo para tomar la decisión deseada.
Utilizan copywriters desde IKEA, para sus textos en los centros comerciales que te invitan a coger un carro o un lápiz, hasta las web de servicios o de profesionales de todos los sectores. Y son verdaderamente rentables. No se basan en suposiciones si no en pruebas y analitica de datos. La mejora de unos textos puede duplicar tu facturación. No en balde, en ocasiones, estos profesionales llegan a cobrar cientos de euros por unos párrafos, ya que conlleva un gran investigación previa del mercado y el cliente.
Afiliado: Muchas veces habrás oído hablar de gente que gana dinero mientras duerme o durante todo el día aunque no haga nada. Es cierto que se pueden llamar “ingresos pasivos”, pero para lograrlos no están exentos de haber trabajado duro. Puede ser una profesión relativamente cómoda, ya que no tiene que lidiar con los inconvenientes de la logística, los productos, stock, clientes y atención o soporte. Básicamente los afiliados ganan comisiones por recomendar o hablar de unos u otros productos, de terceros. Si la venta tiene lugar gracias a sus consejos (según el contrato) cobrarán un tanto por ciento y como con Internet es tan fácil de rastrear, el vendedor sabe que afiliado atrajo al cliente que compró cada producto, así que todo ocurre de manera automatizada, la contabilidad el cobro, etc. No parece complicado, pero antes hay que conseguir, posicionarse, que tu opinión cuente y que tengas el tráfico suficiente para poder vivir de ello. Pero para esas tareas también hay “neoficios” especializados.
SEO: sus siglas en inglés Search Engine Optimization, quieren decir Optimización en Motores de Búsqueda, lo que significa adecuar la web y el contenido para que posicione lo mejor posible en los buscadores, de manera natural. Esto es como que tu negocio esté en la Gran Vía. Se entiende que sin pagar en publicidad, los potenciales clientes lo verán más. Hay profesionales SEO que se encargan, a nivel técnico, de aplicar estrategias para que una web le guste a Google y otros buscadores y aparezcas mejor posicionado para determinadas búsquedas. Y es sumamente importante para obtener el llamado tráfico orgánico, es decir, el que ocurre de manera natural sin estrategias de pago y debido a las búsquedas de los usuarios.
: Otro “neoficio” en el que los profesionales también consiguen tráfico para tu web, pero a diferencia de los SEO, lo hacen con medios de pago. Esto incluye la planificación de las campañas publicitarias, su diseño y la implementación en las plataformas de anuncios, como pueden ser Facebook, Google y otras que colocarán la publicidad en otra webs relevantes que alquilan espacios publicitarios y, por último, la optimización de las campañas y el análisis de los datos. Trabajan con indicadores y ratios como las impresiones, (veces que se muestra el anuncio), los clicks en el anuncio, el CTR o ratio de clicks entre impresiones, y muchos más que incluyen todo el proceso, desde la visualización del anuncio, hasta la compra, si existe en la web de destino del anuncio. Todo perfectamente rastreado y analizado para adaptar la publicidad al mejor público y maximizar las ventas.
Son decenas los “neoficios” y especialidades que existen en el mundo digital y muchos de ellos a pesar de sonar extraños o utilizar otro lenguaje. Bien explicados son fáciles de aprender y cualquiera puede formarse desde casa. Estos son los temas que se tratarán en septiembre en el I Congreso Internacional de Neoficios.
Todos los ciudadanos, podrán descubrir gratis y online, a través de entrevistas a los mejores maestros, los diferentes “neoficios”. Además de conocer la historia de gente que decidió aprovechar esta oportunidad hace pocos meses y ya está viendo buenos resultados.
En España esta oportunidad de formación tan democratizada y de digitalización de negocios, está comenzando aún. Es habitual ver que la mayoría de maestros en “neoficios” de nuestro país, no llevan más de cuatro años, con su actual profesión. Y muchos de ellos ya sobrepasan el millón de euros de facturación anual, con equipos muchas veces de menos de cinco personas. Escritores, personas con incapacidad laboral, artesanos, amas/os de casa, desempleados, estudiantes, jubilados, son muchos los ejemplos ya que han comenzado a aprender con los mejores y de manera especializada y están viviendo mejor que nunca, disfrutando de más tiempo para los suyos. El límite lo pone uno mismo.
Gonzalo Barrio de SoyGon.com