España cuenta con un ecosistema emprendedor maduro gracias al ecosistema startup que supera los tres años de media, cifra que en 2019 alcanzaba los 2,2 años. El 17 % de las startups en España ya son scaleups y un 4 % cuenta con un negocio consolidado, tal y como se desprende del Mapa del Emprendimiento 2023 de South Summit, desarrollado en colaboración con IE University para el que se han analizado más de 2.800 proyectos inscritos a la Startup Competition de la última edición de South Summit Madrid, de los cuales un 80 % son internacionales.
La reducción de los plazos de constitución de las startups ha favorecido a la madurez del ecosistema. Ahora más del 40 % se registra legalmente a la par que empieza a desarrollar su idea de negocio. Una solidez que también se observa en el empleo ya que el 68 % de las startups en España tiene entre dos y diez empleados, el 35 % ha llegado a contar con más de diez empleados en su primer ejercicio y dos de cada tres esperan contratar más empleados en 2024.
Madurez y crecimiento que sólo se pueden mantener con innovación y con una perspectiva ecológica y sostenible. Esto último se refleja en la popularidad de este tipo de industria dentro del ecosistema emprendedor global que alcanza al 5 % de todas las startups de nueva creación, situándose como la cuarta más popular. Fintech sigue en primer lugar (6,5 %), aunque desciende ligeramente del 7,3 % conseguido el año pasado, seguida por healthcare y desarrollo de software.
En el ámbito de la innovación, el informe destaca la importancia de la IA entre las startups al incorporarla una de cada cuatro a sus procesos, por delante de las apps.
La financiación también ayuda a los emprendedores. A pesar de que los fondos propios siguen siendo la principal vía de financiación de las nuevas startups, con un 44 %, su importancia disminuye en favor de los fondos privados, que alcanzan el 33 % y crecen 22 puntos porcentuales desde 2018. Por su parte, los fondos públicos, cuya participación ha crecido 2 puntos porcentuales respecto a 2020, representa el 7 % de la financiación de las empresas, superando al crowfunding y al crédito bancario.
La alta cualificación de los emprendedores es otro elemento destacable. España es la región más formada por delante de Norteamérica y el resto de Europa ya que el 79 % de los integrantes de las startups españoles cuenta con un máster y/o doctorado, cifra que supera en gran medida a la de sus homólogos en Europa (76 %) y Norteamérica (62 %).
La asignatura pendiente sigue siendo la incorporación de la mujer al ecosistema. El 59 % de startups están fundadas únicamente por hombres, mientras que los equipos mixtos representan 1 de cada 3 nuevas startups, y los que están formados sólo por mujeres pasan del 6 % en 2002 al 8 % este año.
Respecto a la proporción de hombre y mujeres en los puestos de CEO en las startups fundadas sólo por hombres, el 100 % tiene un CEO masculino, mientras que las startups fundadas únicamente por mujeres tienen un 28 % de CEO hombres. Por su parte, las startups con equipos mixtos la proporción 80/20 se mantiene respecto al género de sus CEO.