En un entorno económico caracterizado por la incertidumbre y fluctuaciones constantes, la disponibilidad de maquinaria y equipos es clave para mantener la operatividad de las empresas. Sectores como la construcción, logística y manufactura deben asegurar su capacidad productiva y competitividad, sin poner en riesgo su estabilidad financiera. La compra directa de activos, una opción común, puede representar una carga económica significativa, especialmente para las pequeñas y medianas empresas, que representan la mayor parte del tejido empresarial español, con 2.942.716 empresas registradas hasta diciembre de 2024 según la publicación Cifras PYME.
Según la Asociación Española de Leasing y Renting (AELR), en 2024 las empresas españolas invirtieron 8.718,3 millones de euros en leasing para financiar activos mobiliarios e inmobiliarios. Este crecimiento refleja cómo las compañías están recurriendo al leasing y renting como soluciones estratégicas para obtener equipos esenciales sin comprometer su liquidez y garantizando su operatividad.
Acquis destaca las principales ventajas de estas soluciones para las empresas arrendatarias y las entidades financieras arrendadoras. El leasing permite a las empresas mantener liquidez y destinar recursos a áreas críticas sin comprometer su capacidad de inversión, lo cual resulta fundamental en un mercado como el español, donde las pymes son el motor económico.
El leasing y renting también permiten a las entidades financieras diversificar el riesgo entre diversos clientes y sectores, estructurando pagos periódicos que facilitan la planificación financiera y reducen el riesgo de impago. Además, los activos arrendados pueden ser gestionados de forma eficiente, permitiendo su reutilización y reubicación conforme a la demanda del mercado.
El leasing es especialmente útil en sectores donde la tecnología avanza rápidamente. Permite a las empresas renovar sus equipos con facilidad, evitando la obsolescencia y manteniendo su competitividad. Además, los contratos de leasing son más flexibles que la compra directa, lo que permite ajustar las condiciones a las fluctuaciones del mercado sin comprometer la operatividad.
Finalmente, contar con seguros especializados dentro del contrato de leasing es esencial para proteger los activos empresariales y garantizar la continuidad operativa. Estos seguros cubren posibles daños, robos o fallos mecánicos, asegurando que los equipos arrendados funcionen de manera óptima. En un entorno empresarial incierto, disponer de un seguro adecuado no solo es preventivo, sino una estrategia clave para garantizar la estabilidad y resiliencia del negocio.