La Seguridad Social ganó en octubre 141.926 afiliados, superando los 21,83 millones de ocupados, gracias al empuje del sector educativo, que sumó 167.323 trabajadores con la reanudación de la actividad docente. Sin embargo, este crecimiento ocultó caídas importantes en otros sectores donde las pymes tienen fuerte presencia, como hostelería (-50.594) y actividades sanitarias y servicios sociales (-34.341), además de la agricultura, que perdió más de 2.200 afiliados.
El régimen de autónomos también creció, con 9.142 afiliados más hasta alcanzar los 3,42 millones, aunque su avance interanual fue de solo 1,11 %, muy por debajo del crecimiento del régimen general. Esto evidencia que las pequeñas empresas y los autónomos enfrentan dificultades para expandirse de manera sostenida, pese a ser motores esenciales del empleo local.
El paro aumentó en 22.101 personas, situando el total de desempleados en 2.443.766. Los mayores incrementos se dieron en servicios, industria y agricultura, mientras que la construcción fue el único sector que registró descensos. Estos datos muestran que la recuperación del empleo sigue siendo desigual, afectando con más fuerza a sectores donde predominan las pymes y la estacionalidad marca los ritmos de contratación.
Para la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME), estos números reflejan la vulnerabilidad de las pymes frente a la estacionalidad, la rigidez normativa y los costes crecientes. La organización subraya que estas empresas ya han soportado un incremento acumulado de más del 23 % en costes laborales y cargas administrativas en los últimos seis años, lo que limita su capacidad de inversión y contratación.
CEPYME reclama medidas que fomenten la estabilidad del empleo y reduzcan la incertidumbre normativa, especialmente en sectores estratégicos para las pymes. La organización considera clave minimizar los efectos de la estacionalidad, incentivar la inversión en nuevos proyectos y proteger a los autónomos y pequeñas empresas de políticas que puedan aumentar su carga operativa y financiera.
En un contexto de crecimiento desigual, las pymes siguen siendo un pilar del empleo en España, pero necesitan un marco más favorable que les permita contratar, crecer y competir de manera sostenible.






