Las expectativas de los compradores B2B evolucionan a un ritmo que muchas empresas no logran seguir. Los clientes buscan interacciones personalizadas y basadas en datos en tiempo real, recurriendo cada vez más a herramientas de inteligencia artificial para tomar decisiones de compra.
Según IDC, esta transformación está impulsando un cambio profundo en el mercado. Para 2027, se estima que las compañías invertirán 150.000 millones de dólares en infraestructura, plataformas y servicios de IA, con el objetivo de ofrecer experiencias más relevantes y competitivas. El engagement ya no es solo un área de marketing, sino un factor para el crecimiento y la fidelidad del cliente.
El estudio identifica tres tendencias que marcan esta nueva era: los clientes esperan personalización en cada interacción, utilizan IA para guiar sus decisiones y valoran la confianza y la transparencia de las marcas. IDC advierte que las empresas que no adopten prácticas éticas y transparentes podrían perder hasta un 79 % de la lealtad de sus clientes para 2026.
Para adaptarse, las empresas deben centrarse en tres principios: construir inteligencia sobre el comprador, garantizar transiciones coherentes entre cada interacción y alinear equipos de marketing y ventas. Esta combinación permite que los mensajes sean relevantes, oportunos y consistentes a lo largo de todo el recorrido del cliente.
En la práctica, esto se traduce en pasar de campañas estáticas a experiencias omnicanal adaptativas, donde cada acción del cliente genera respuestas personalizadas. Plataformas integradas, análisis de datos y automatización son herramientas esenciales para crear interacciones que realmente impacten en la decisión de compra.
IDC concluye que la nueva generación de engagement B2B es tanto una oportunidad como un desafío: las empresas que integren inteligencia de datos, IA y coordinación entre equipos estarán mejor posicionadas para crecer, fidelizar clientes y mantenerse competitivas en un mercado cada vez más exigente y acelerado.






