El Parlamento Europeo ha decidido poner fin a la injusticia que se estaba llevando a cabo con las pymes. Y es que hasta ahora, sin un marco regulatorio a nivel comunitario, se producían agresivas prácticas de planificación y evasión fiscal por parte de las grandes empresas que no pagaban impuestos sobre sus ganancias, cosa que no sucedía con las pymes, que sí los pagaban. Por ello han aprobado una resolución para que las multinacionales paguen los impuestos donde generan el beneficio y los Estados miembros obliguen a las multinacionales a desglosar país por país la información sobre beneficios e impuestos.
Los eurodiputados piden una base imponible común consolidada para el impuesto de sociedades, definiciones comunes de términos tributarios y más transparencia respecto a los acuerdos fiscales —hasta ahora secretos— con las grandes compañías. Además, abogan por introducir definiciones de “naturaleza económica” y otros términos clave para el cálculo de la factura tributaria de las compañías. A su juicio, los Estados miembros deben consensuar su posición sobre los denominados acuerdos fiscales y los “precios de transferencia” —que determinan cómo se valoran las transacciones dentro de la misma compañía—.
Además, los eurodiputados creen que es necesario establecer una base imponible común para el Impuesto sobre Sociedades tan rápido como sea posible para poner fin a disparidades entre los sistemas tributarios nacionales, instando a los Estados miembros a compartir sus acuerdos fiscales y otra información tributaria que afecta a otros Estados miembros; y propone una mejor protección para los delatores cuyas revelaciones benefician al interés común.