Tras ocho años en el mercado, Aircall sigue su trayectoria ascendente. Presente en cuatro continentes y con una cartera de más de 13.000 clientes, repartidos en 90 países, más de 1.000 en España, la multinacional especializada en telefonía en la nube empresarial ha decidido abrir su tercera oficina europea en Madrid. España ha sido el lugar elegido por el más que óptimo ecosistema de startups con el que cuenta nuestro país y la calidad de nuestros profesionales tecnológicos. Además, desde la compañía reconocen que las empresas españolas recurren con mayor frecuencia a los servicios en la nube para llevar sus operaciones a otro nivel, con el fin de incrementar el valor que ofrecen a sus clientes.
2014 fue el inicio de esta gran aventura empresarial. Hoy, en 2022, Aircall se ha convertido en una empresa unicornio (aquellas que alcanzan una valoración de 1.000 millones de dólares sin tener presencia en Bolsa). Olivier Pailhès, cofundador de Aircall, comentó durante la presentación de la nueva oficina que la compañía nació al percibir que las soluciones de telefonía que había en el mercado eran muy básicas. “Lo importante no es llamar”, manifestó, “es conseguir una mayor productividad y una mejor experiencia de cliente”. Y para ello crearon un sistema de telefonía que conecta con el software que utilizan las empresas.
En esa necesidad que tienen los clientes de sentirse únicos, algo que cada día demandan con más fuerza, el canal telefónico es fundamental. Por ello Pailhès reconoce que la obsesión de Aircall por el cliente es una máxima y en cada proceso de crecimiento de la organización estudian con detenimiento el impacto que cada decisión va a tener en el cliente.
¿Cómo ayuda Aircall a las organizaciones? Su objetivo es facilitarles a centralizar la información de los clientes para tener conversaciones lo más cómodas posibles, aseguró Anna Nuñez, sales manager Iberia & LatAm de la compañía. “Facilitar la vida del operador y el cliente”.
¿Cuál es el ROI que consiguen las organizaciones con Aircall? Este se mide en un impacto directo en la productividad, que crece de manera exponencial, asegura la directiva. Algo que también confirma la consultora Forrester, con un aumento del 20 % de la misma. Sin olvidar algo importante: el control de gastos que pueden llevar a cabo las empresas ya que pueden prever cuál será su inversión en telefonía para el siguiente año. “Esto permite a una empresa crecer de manera sostenible”, reconoce Núñez.