España es un país de PYMES. Según el informe «Cifras PYME» de marzo de 2024 de la Dirección General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa (DGEIPYME) el número total de empresas pequeñas y medianas asciende a 2.936.243, de las cuales 1.332.650 cuentan con empleados. 9.617.631 personas desarrollan su actividad profesional en pymes.
A tenor de estos datos, es imperativo que las empresas españolas se reinventen y apuesten por la innovación, un mensaje que no está calando en este tipo de compañías, más si se tiene en cuenta los últimos datos de un estudio de Accenture que afirma que sólo el 8 % de las empresas tiene previsto adoptar una estrategia de reinvención integral.
¿Cuál es la principal consecuencia de no apostar por la reinvención? La pérdida de ingresos y de competitividad. El informe destaca que aplicar la reinvención a las compañías puede aumentar los ingresos en un 10 % y reducir los costes en un 13 % consiguiendo mejorar la cuenta de resultados en un 17 %.
Asimismo, esta estrategia también tiene un impacto de carácter cualitativo porque estas compañías obtienen mejores resultados en áreas como sostenibilidad (32 %), experiencia de clientes (31 %) o innovación y talento (11 %).
Además de los beneficios económicos, estos procesos de reinvención e innovación tienen gran importancia empresarial al permitir una resolución de problemas más ágil, una mejor adaptación al cambio o destacar entre la competencia.
No obstante, el proceso de implantación de una innovación a reinvención puede resultar abrumadora para una pyme, y por ello, HubSpot desvela 5 claves para implementar un proceso de innovación de forma exitosa: identificar el problema, detectar las oportunidades en el mercado, formar un equipo multidisciplinar y desarrollar ideas, crear prototipos y promover una cultura de la innovación.