La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME) ha destacado el papel del sector privado en la creación de empleo, al registrar un crecimiento del 2,3 % interanual y sumar 411.300 nuevos afiliados. Sin embargo, la patronal advierte del riesgo que suponen para las empresas, especialmente para las pymes y microempresas, el aumento sostenido de costes, el exceso de carga burocrática y la incertidumbre normativa.
Según CEPYME, estas circunstancias están limitando la competitividad y la capacidad de crecimiento de muchas compañías, y en algunos casos, comprometiendo su continuidad. Como ejemplo, recuerda que en julio de 2025 existían cerca de 20.000 microempresas menos que en el mismo mes de 2019. La organización subraya la necesidad de fortalecer el tejido empresarial, impulsar el crecimiento de las pequeñas empresas y evitar la proliferación de normativas que elevan los costes operativos.
Todo ello en un contexto en el que la afiliación a la Seguridad Social cayó en agosto en 199.300 personas, una cifra ligeramente superior a la del mismo mes del año anterior (-193.704), pero dentro de lo habitual para esta época del año. El número total de afiliados se situó en 21.666.203 personas, con un crecimiento interanual del 2,25 %.
Por sectores, la construcción lideró el crecimiento del empleo con un aumento del 3,5 % y 48.900 nuevos afiliados, su mejor dato desde agosto de 2023. Le siguió el sector servicios, que sumó 392.600 empleos (+2,4 %), y la industria, con un alza del 1,7 % (41.600 empleos más).
En cambio, el sector agropecuario continuó perdiendo empleo, con una caída interanual del 0,6 % (-6.300 afiliados). En comparación con agosto de 2019, esta actividad ha visto desaparecer un 8,9 % de sus puestos de trabajo, lo que equivale a 96.300 empleos menos.
En cuanto al paro registrado, el mes de agosto cerró con 21.905 desempleados más, elevando la cifra total a 2.426.511 personas. CEPYME insiste en que, para sostener y ampliar la recuperación del mercado laboral, es urgente crear un entorno más favorable para las pequeñas empresas, que representan la base del tejido económico del país.