La última Encuesta de Población Activa (EPA), correspondiente al segundo trimestre de 2023, refleja el buen ritmo de creación de empleo. Actualmente la cifra de ocupados en España si sitúa por encima de los 21 millones, 603.900 personas más trabajando que en el primer periodo del año. Un incremento de población activa que ha provocado que el desempleo descienda en 365.300 personas y la tasa de paro se sitúe en el 11,6 %.
Cifras que desde CEPYME valoran positivamente, aunque piden prudencia a la hora de interpretar los datos porque aseguran que se advierten distintas muestras de debilidad en el mercado laboral como, por ejemplo, el creciente número de ocupados sin horas trabajadas que dificultan la interpretación de los datos.
Además, la confederación alerta sobre la situación que atraviesa la industria, sector vital para la economía española y que encadena tres trimestres consecutivos con disminución de empleo. De hecho, en el segundo trimestre es el único sector que ha perdido puestos de trabajo, concretamente 64.500. Un comportamiento de la industria que confronta con lo que es habitual en la marcha de este sector en los segundos trimestres.
Un comportamiento que preocupa a CEPYME ya que la demanda del sector industrial no acaba de repuntar. Realidad que se suma a la caída del gasto en el consumo final de los hogares y a los efectos de la restricción y del endurecimiento del crédito. Todo ello hace prever un otoño complicado para la actividad empresarial y, por ende, para la evolución del empleo.
Con este escenario, desde la confederación se pide responsabilidad a los partidos políticos para ayudar a crear un escenario de estabilidad política con el fin de beneficiar la buena marcha de la economía española. Además, CEPYME insta a modificar las políticas de incremento de costes que afecta especialmente a las pymes y recuerda que la reducción de los márgenes empresariales limita la capacidad de estas empresas de afrontar nuevos reveses económicos y mantener el empleo.