El periodo medio de pago (PMP) se situó en 82 días, cuando el plazo máximo legal de pago es de 60 días, durante el tercer trimestre de 2023. Así se extrae del “Observatorio de morosidad” de CEPYME. La confederación alerta sobre la situación financiera de las empresas españolas en un periodo en el que la deuda comercial de las empresas se ha duplicado llegando a los 2.700 millones de euros en cómputo anual para el conjunto de pymes.
Esta deuda de 2.700 millones, la cual se produce pese a la restricción del crédito comercial, es la mayor desde junio de 2009. De esta cantidad, 1.400 millones corresponden a la financiación de las ventas que se cobran dentro de los plazos acordados, mientras que los 1.300 millones restantes son el tramo moroso de la deuda comercial, es decir, las ventas que se cobran pasados los 60 días.
La demora en los cobros lastra la liquidez de las pymes. Por ello, desde CEPYME piden medidas que ayuden a estas empresas y, además, la confederación está trabajando con las instituciones comunitarias en la nueva regulación que está elaborando la Comisión Europea. Un reglamento que está pensado para reducir los plazos de pagos de las empresas, problema que afecta a todas las compañías europeas y, especialmente, a las españolas.
Datos destacados del análisis
El periodo medio de pago ascendió, durante el tercer trimestre de 2023, hasta los 82 días, es decir, un 0,7. Ascenso que llega tras cuatro trimestres consecutivos de caídas interanuales. De los cuatros grandes sectores económicos, el PMP únicamente subió, hasta los 100 días, en la construcción.
El análisis de CEPYME muestra que en el trimestre pasado el PMP solo se redujo en las microempresas, mientras que las compañías pequeñas y medianas registraron aumentos interanuales moderados. Respecto a las grandes corporaciones, el estudio de la confederación refleja que pagaron el 5,9 % de las facturas más de 30 días después del vencimiento. Porcentaje que asciende a 6,3 % en las empresas medianas, al 6,8 % en las pequeñas y al 12,4 % en las microempresas.
Además, el informe analiza el índice de morosidad en las facturas de ventas a plazo (IMFVP). Aspecto en el que, durante el tercer trimestre, se registró el sexto incremento interanual consecutivo con 49,9 puntos. Sin embargo, el IMFVP descendió en el sector agroalimentario y la construcción. Por último, cabe destacar que el IMFVP creció en todos los datos de empresas por tercer trimestre consecutivo.