El uso del almacenamiento en la nube entre las pequeñas y medianas empresas españolas se disparó un 110 % durante 2024, según el último informe del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad. El estudio confirma además que el 31,8 % de las pymes ya utiliza servicios cloud de forma habitual, un dato que para los especialistas marca “un cambio definitivo” en la manera de gestionar la información en el tejido empresarial. “Hoy, la prioridad es trabajar desde cualquier dispositivo y lugar, con una gobernanza sólida de los datos en un entorno cada vez más competitivo”, explica Sergio García Estradera, gerente de i3e.
Aunque recientes interrupciones en los servicios de gigantes como AWS o Cloudflare han generado alarma en miles de negocios, desde i3e insisten en que estos episodios no deben frenar la digitalización. “Las PYMES no pueden dejar que cunda el pánico: la transformación digital sigue siendo clave y pasa por soluciones seguras, eficientes y con acceso inmediato a la información”, señalan sus expertos.
La compañía subraya que el cloud continúa siendo la alternativa más fiable para garantizar la continuidad del negocio. “Es una caja de seguridad frente al riesgo de que, si sucede algo con los sistemas de almacenamiento locales, los datos puedan perderse para siempre”.
El informe también destaca que las empresas pueden reducir sus costes de inversión hasta en un 53 % cuando adoptan soluciones en la nube, una ventaja especialmente relevante para organizaciones con recursos limitados. Para García Estradera, estos números respaldan la tendencia creciente: “Un crecimiento tan desmedido demuestra que las empresas cada vez confían más en la eficiencia, el acceso inmediato a la información y la seguridad que aporta la nube”.
En un escenario dominado por grandes proveedores globales, y sus ocasionales fallos, desde i3e recuerdan que existen alternativas viables para cualquier empresa. Una de ellas es la implementación de servidores NAS propios, ya sea en las oficinas o en ubicaciones externas con acceso mediante permisos y credenciales.
Según los expertos, este tipo de instalaciones ofrece beneficios a largo plazo: “No dependemos de contratos con terceros, no hay cuotas mensuales para mantener la infraestructura y sabemos en todo momento dónde se encuentran físicamente nuestros datos”. Eso sí, García Estradera incide en la importancia de contar con personal cualificado para su gestión, un ámbito en el que empresas como i3e juegan un papel fundamental.
En un contexto de ciberataques cada vez más sofisticados, la protección de los datos empresariales se convierte en una prioridad absoluta. “No todos los servidores en la nube, por muy locales que sean, sirven para mantener los datos de las empresas”, advierte García Estradera. La cuestión no es solo garantizar el acceso rápido y cómodo a la información, sino impedir que personas no autorizadas puedan obtenerla.






