España cuenta con el primer programa abierto de mecenazgo tecnológico orientado a la excelencia y el impacto: Orbita.k. Una iniciativa abanderada por la compañía Kaudal, que nace con el objetivo de crear un entorno relacional de agentes de I+D+i en un momento en el que, para la recuperación del país, son fundamentales la ciencia y la tecnología.
¿Qué tipo de compañías pueden participar? Empresas españolas de todos los sectores, centros tecnológicos y entidades investigadoras españolas privadas que estén llevando a cabo proyectos punteros de I+D o de innovación tecnológica. Y de sectores como salud, medioambiente, agroalimentario, energía, industria e industria digital, espacio o biotecnología. Diego Fernández, presidente de Kaudal, subraya que los proyectos elegidos deberán contar con una innovación excelente, mejorando el estado del arte actual. Al tiempo que deberán ayudar a resolver problemas actuales de la sociedad e incidir en el I+D.
En su primera convocatoria, abierta hasta el 30 de agosto, se identificarán proyectos que respondan a retos sociales, desarrollando nuevas tecnologías que aporten a las empresas recursos privados que les lleven al siguiente nivel. Estos proyectos pueden estar en diferentes fases de desarrollo o TRL (Technological Readiness Level).
Las empresas conseguirán, a través de Orbita.k recursos del 25 % del gasto de los proyectos I+D y del 12 % de los proyectos de IT, como mínimo. El importe mínimo del gasto de proyecto es de 250.000 € si es I+D y 400.000 € si es IT. La capacidad de estructuración de proyectos puede llegar hasta los 200 millones de euros.
Inversores, empresas y organizaciones privadas que quieren apoyar proyectos de I+D+i motor de la sociedad, participan a través del mecenazgo tecnológico, un instrumento de inversión colaborativa que canaliza nueva inversión privada a proyectos de I+D+i a partir de una estructuración basada en los incentivos fiscales aplicables a la investigación, el desarrollo y la innovación.
En este programa Kaudal va de la mano de la Fundación Pfizer, DRO (Fundación Damián Rodríguez Olivares) y ASE-Acción Social Empresarial (Acción Social Empresarial), que se unen al proyecto para lograr una mayor difusión y alcance dentro del ecosistema del I+D+i.