Hasta hace unos años, las empresas españolas que exportaban alcanzaban la cifra máxima de un millar. Hoy en cambio, esta tónica ha dado un vertiginoso giro y los empresarios de las pymes españolas se han dado cuenta de la gran importancia que supone exportar sus productos o servicios, o incluso acometer un proceso de internacionalización, para hacer frente a un entorno con mercados cada vez más competitivos.
Sin embargo, siempre ronda por la cabeza de alguno de estos empresarios que, debido a sus reducidos recursos, se trata de un proceso demasiado complejo para ellos. “Pero es aquí donde reside su valor añadido. Debido a nuestra amplia trayectoria como operador logístico, gestionando más de 30 millones de envíos, entre nacionales e internacionales, al año, queremos desvelar algunas de las principales ventajas con las que cuentan las pymes a la hora de decidir dar el salto a la internacionalización”, destaca Nicolás Mouze, director de marketing y ventas de DHL Express.
La toma de decisiones suele ser más ágil, debido al menor tamaño de sus equipos directivos. Ello se convierte en una baza fundamental en el plano internacional, pues posibilita a la pyme optimizar las acciones rentables producidas en el mercado exterior; al tiempo que para aquéllas que hayan resultado erróneas, será más ágil su reorientación para corregir ese desvío. Todo ello repercutirá favorablemente en su rendimiento económico.
Las pymes pueden gestionar de manera global e integrada los problemas y oportunidades que surjan durante el proceso de internacionalización. Además, permite una planificación coordinada y coherente en la asignación de los recursos que precisa cada área de la empresa.
Para poder competir en el mercado internacional, las pymes suelen implicarse mucho en la calidad del servicio y producto que comercializan. Invierten gran cantidad de esfuerzo en garantizar la satisfacción del cliente y ofrecen un buen servicio postventa.
Normalmente, al disponer de un reducido tamaño de sus plantillas, existe una fuerte vinculación entre la dirección y los empleados, no solo profesional sino también de forma personal. Esto hace que los empleados interioricen la cultura corporativa, implicándose en la estrategia empresarial, pues es clave para la actividad de la empresa en el exterior, ya que los empleados juegan un papel activo muy importante.
Las pymes son más flexibles en la oferta de servicios y productos, puesto que no se comercionalizan de la misma manera en todo el mundo. Es preciso personalizar la oferta en base a los diferentes estilos de vida, costumbres o valores. Así, los productos especializados, los productos con una denominación de origen protegida y las tendencias específicas de cada país, seguirán gozando de fuertes oportunidades de crecimiento.
“Estas son algunas de las ventajas, aunque cada empresa es diferente y debe conseguir encontrar aquel valor diferencial que le permita destacar entre la competencia en el nuevo entorno. Por ello, un año más, volvemos a poner en marcha el proceso de recepción de candidaturas para una nueva edición de nuestros premios DHL Atlas a la Exportación. Queremos premiar a las Pymes implantadas en España y que han sabido aprovechar las oportunidades que les ofrece el mercado exterior”, concluye Nicolás Mouze.
El plazo para presentar las candidaturas a las distintas categorías finalizará el 6 de enero. Posteriormente, un jurado independiente formado por expertos en materia de exportación analizará cada una de las candidaturas recibidas, dando a conocer a los galardonados en un evento a principios de febrero. Las categorías de los premios DHL Atlas a la Exportación son: Gran Premio a la Exportación, Accésit a la Exportación más Innovadora, Accésit a la Exportación más Sostenible y Accésit a la Exportación a través del E-commerce.