El Gobierno y Ciudadanos pactaron una reforma de la Ley Integral de Autónomos con el objetivo de mejorar determinados aspectos para los trabajadores por cuenta propia. Ahora, a la luz de las medidas que están pendientes de aprobación e incorporación, nos preguntamos si son suficientes.
Dado que, actualmente, tenemos a unos trabajadores autónomos que se esfuerzan por facturar cantidades elevadas para poder pagar una cuota desorbitada y nada proporcionada y que, además, cuentan con muchos menos derechos que los trabajadores por cuenta ajena, lo lógico sería pensar que hacerse autónomo no tiene ninguna ventaja. Por esdte motivo, el Gobierno pactó con Ciudadanos una reforma de la Ley Integral de Autónomos en la que se incluirían medidas interesantes para este colectivo.
Sin embargo, ¿son suficientes estas medidas? ¿Se está tratando de modificar lo que más preocupa a los autónomos?
A continuación os dejamos las medidas que incluirá la reforma y hablaremos de aquellas que han quedado excluidas de la misma y que creemos que son importantes.
Las medidas que incluirá la reforma
- Flexibilizar los recargos o multas por los retrasos en los pagos de las cuotas de la Seguridad Social.
- Ampliar de la tarifa plana de 50 euros para los nuevos autónomos, de los seis meses – como está ahora mismo – hasta los doce.
- Modificar el sistema de altas y bajas en la Seguridad Social. Esto quiere decir que la cuota que corresponda al mes de alta, de baja o de afiliación, de computará desde ese mismo momento.
- Equiparar las deducciones del IVA y el IRPF. Es decir, a partir de ahora se permitiría una deducción del 50% de los gastos de IRPF relacionados con el vehículo utilizado en la actividad empresarial, así como los gastos de agua y luz generados por dicha actividad.
- Aumentar el número de cambios en la base de cotización. Se permitirán hasta cuatro cambios.
- Mejoras en cuanto a aspectos sociales:
- Mejoras en las bonificaciones de los autónomos al cuidado de familiares.
- Mejoras en las bonificaciones de permiso por maternidad, paternidad, adopciones, acogimiento, riesgo en la lactancia natural o suspensión por paternidad.
- Equiparar los incentivos económicos para las madres que sean trabajadoras autónomas con las que trabajadoras por cuenta ajena.
¿Son suficientes estas medidas?
Desde nuestro modesto punto de vista: No.
Sinceramente, estas medidas supondrán un cambio sustancial en la actual situación de los trabajadores por cuenta propia de nuestro país, pero no son la panacea. De hecho, no se han tratado los aspectos más importantes o, al menos, los que más preocupan a los autónomos.
La principal queja de los autónomos, a día de hoy, es precisamente la elevada cuota que tienen que pagar, reivindicando que lo lógico sería una cuota que aumentase conforme a su facturación, como ya se hace en otros países comunitarios. Para muchos autónomos es impensable pagar la friolera de 260 euros al mes debido a su baja cotización, por no hablar de mantener esta cuota en periodos de cotización nula como las vacaciones o los periodos de baja por enfermedad.
Otra de las quejas de los autónomos españoles es que, siendo trabajadores igual que los contratados por cuenta ajena, tiene muchísimos menos derechos que estos últimos. Equiparar determinados derechos como el sistema de las pensiones para autónomos, el paro o las bajas, es algo que está empezando a ser de vital importancia para los trabajadores por cuenta propia.
Por último, pero no menos importante, está la figura del autónomo colaborador. Una figura que pasa desapercibida entre los nuevos autónomos que quieren comenzar con su negocio y que están pensando que, en el futuro, su empresa servirá para dar un puesto de trabajo digno a su cónyuge o a sus descendientes. Sin embargo, estos autónomos tienen los mismo deberes que un autónomo común, pero con mayores incomodidades, ya que – como se supone que están bajo el amparo del autónomo titular – los derechos se reducen considerablemente.
No darle solución a todas estas razonables quejas por parte de los autónomos españoles, es una irresponsabilidad, sobre todo, porque si quieres comenzar con un negocio propio te obligan a ser autónomo.
Todas las PyMes de nuestro país tienen a la cabeza, al menos, un trabajador por cuenta propia que, además, es el encargado de contratar a otras personas y, por lo tanto, genera empleo. Es posible que con las «atractivas» medidas que se están planteando aprobar en esta nueva reforma de la Ley, consigan incrementar el número de altas en el RETA, pero la realidad es que será algo efímero, porque a la larga, no compensa ser autónomo si no tienes una facturación elevada.