Óscar López, ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, ha anunciado, en el marco del MWC, que tras lanzar recientemente una convocatoria para impulsar el uso de la inteligencia artificial y del dato en la pyme española, con un presupuesto de 34 millones de euros, en unos días lanzará otra de 130 millones de euros de los fondos FEDER para la integración de la inteligencia artificial en la cadena de valor de las empresas a través de Red.es. Ayudas con las que se financiarán proyectos con hasta un máximo de cinco millones de euros para el desarrollo experimental en las que se hará un uso intensivo de tecnologías asociadas a la IA como las relacionadas con el machine learning, deep learning o LMS, por poner algunos ejemplos.
Una convocatoria a la que se sumará una segunda con 50 millones de euros para la integración de la IA en empresas del sector sanitario. En conjunto, las tres, sumarán más de 200 millones de euros para la integración de la IA para el ecosistema emprendedor español.
Durante la presentación el ministro llegó a comparar la competición por desarrollar la inteligencia artificial con la carrera espacial que se produjo durante la “guerra fría”. “La IA no es sólo una tecnología disruptiva, es un acontecimiento histórico”, ha dicho, con potencialidades equiparables a sus riesgos, por lo que debemos llevar a cabo su uso con responsabilidad. Por ello ha reconocido que desde el Gobierno piensan en dos ideas opuestas cuando hablan de IA: humanismo tecnológico y colaboración público-privada, para lo que han desarrollado una estrategia nacional de IA valorada en más de 1.500 millones de euros que se traducen eh la puesta en marcha de una agencia española de supervisión de IA, la primera en el mundo. El lanzamiento de Alia, un modelo de inteligencia artificial público, Y el primer ordenador cuántico con tecnología 100 % europea en Barcelona. Todo ello junto a Spain Neurotech, en Madrid, con el que esperan grandes avances en tratamientos.