El comercio electrónico sigue creciendo en España, sin embargo el peso español en la facturación en europea es de tan solo el 5 %. ¿La buena noticia? El gran potencial que España tiene en este sentido. Es más, según datos de emarketer, ofrecidos por la compañía Gedeth Metwork, experta en servicios de consultoría de negocio para procesos de internacionalización y proyectos de captación de inversión, las ventas mundiales hacia el consumidor crecerán este año más de un 20 % y en este crecimiento tendrán mucho que ver las economías digitales emergentes, entre ellos España.
Sin embargo, para triunfar en el exterior nuestras pymes tienen que aplicar una serie de consideraciones, tal y como quedó patente en la jornada abierta AulaComex. Así, se debe abogar por una regulación del mercado, cambiando la regulación europea en lo relativo a pagos, impuestos, IVA, etc. Tener vocación internacional, afianzando en primer lugar el mercado local, promocionándose localmente. Apostar por el comercio móvil, aprovechando la gran penetración de smartphones que tenemos, así como provechar la especialización del producto, adaptándolo a la demanda de cada país. Analizar el ratio de conversiones para identificar los problemas de la página, también es conveniente, al tiempo que habría que estudiar con atención los aspectos legales de cada país porque el comercio electrónico se rige por las leyes de cada lugar. Y, por supuesto, controlar la entrega para que la logística no falle en ningún momento.