El pasado 30 de junio entró en vigor la nueva Ley de Familias. Una normativa que trae consigo cuatro nuevos permisos que los trabajadores podrán solicitar si cumplen con los requerimientos.
El permiso por fuerza mayor es retribuido y da derecho al empleado a ausentarse hasta cuatro días al año por motivos urgentes relacionados con familiares o personas convivientes y su presencia sea indispensable. El segundo es el permiso por accidente o enfermedad. Consiste en cinco días de permiso retribuido por hospitalización o intervención quirúrgica sin hospitalización pero que precise de reposo domiciliario de la pareja o parientes de hasta segundo grado.
El permiso parental es el tercero y gracias al mismo el empleado podrá disfrutar de ocho semanas, de forma continua o discontinua, hasta que el menor cumpla ocho años. A diferencias de los anteriores, este permiso no es retribuido y el trabajador deberá solicitarlo con antelación. Por último, a partir de ahora los empleados que se registre como pareja de hecho podrán disfrutar de 15 días de permiso al igual que ocurre con el matrimonio.
Para que las empresas implementen de manera correctas estas nuevas medidas, los expertos de Woffu aportan cuatro recomendaciones. Por un lado, actualizar las políticas, es decir, las empresas deben revisar sus políticas internas y manuales de empleados para garantizar que cumplen con la nueva normativa.
Por otro lado, la comunicación interna debe ser lo más transparente y clara posible ya que son aspectos fundamentales para cuidar el bienestar de los equipos. La flexibilidad laboral, así como el registro y seguimiento, son las otras dos recomendaciones a seguir para cumplir con la nueva ley.
