En el futuro la pandemia de la covid-19 será recordada por varias razones, entre ellas, ser la palanca del cambio. Cambio en la mentalidad de la población y cambio en el tradicional modelo de trabajo. Y es que esta crisis sanitaria ha llevado el teletrabajo a muchos hogares, dejando al descubierto las numerosas carencias en materia de digitalización de muchas organizaciones.
En España la vuelta a la normalidad y, por tanto, a las oficinas está siendo un proceso lento y costoso. Muchas pymes tienen el difícil reto de encontrar el equilibrio perfecto entre el trabajo en remoto y el presencial. La combinación de ambas modalidades es la clave para asegurarse la continuidad del negocio en estos momentos.
Según el último estudio realizado por Sage, el 15 % de las empresas encuestadas tiene previsto aumentar el teletrabajo en sus organizaciones. Pero esta decisión alberga ciertos inconvenientes que los responsables deben tener en cuenta antes de instaurar el teletrabajo para parte de sus empleados. Y es que los profesionales que trabajan en remoto pueden sentirse aislados, desconectados de la empresa o incluso desatendidos cuando necesitan ayuda. Su productividad también se puede ver afectada, ya que en algunas ocasiones deben enfrentarse solos a ciertas tareas o procesos. Igualmente, los responsables de las organizaciones tienen que analizar si esta nueva modalidad labora es compatible con las necesidades de su empresa.
“Cuando la pandemia golpeó nuestra sociedad las empresas tuvieron que, en muchos casos, cesar su actividad, muchas de ellas tuvieron que tomar decisiones basadas en datos obsoletos”, ha comentado Carles Ransanz, vicepresidente de pequeña y mediana empresa de Sage. “Desde Sage nos hemos comprometido a que las pymes con las que trabajamos tengan la capacidad de estar preparadas para ofrecer a sus trabajadores el equipo necesario para poder llevar a cabo su trabajo. Además, de acompañarlas en el proceso de digitalización de sus negocios”, ha explicado.
Este compromiso incluye diversas acciones como ayudar a las pymes a utilizar herramientas en la nube. Estos sistemas permiten integrar los datos de la empresa y así facilitar la toma de decisiones. Gracias a este ecosistema simplificado y estandarizado las empresas pueden tener una visión completa de 360º.
