La tasa de impago empresarial ha aumentado del 1,5 %, registrado el pasado año, al 2,4 % de 2019. Pero este empeoramiento no se da solo en España, Europa Occidental también se ve afectada por estos impagos que han pasado del 1,3 % al 2,2 %. Estos son los resultados del último Barómetro de Prácticas de Pago difundido por Crédito y Caución.
Asimismo, dicho barómetro ha resaltado que el 88 % de las empresas españolas se han visto afectadas por la morosidad en el último año. Por ello el 31 % de las organizaciones se han visto obligadas a posponer o incumplir los pagos con sus propios proveedores. De esta manera la cadena de valor se ha visto afectada por los efectos negativos de la morosidad. Además, el 33 % de las empresas españolas han incrementado la frecuencia de sus reclamaciones de deuda sobre facturas pendientes y cerca del 20 % han decidido ofrecer descuentos a los clientes que liquiden sus facturas de forma anticipada.
A pesar de todo, las empresas españolas no quieren abandonar su competitividad y quieren seguir creciendo en un entorno donde necesitan protegerse de los efectos negativos de la morosidad. Por esta razón la función de Crédito y Caución es ofrecer soluciones para la gestión de crédito. La mayor tasa de impago se encuentra en el sector del transporte con un 3,4 % de impagos. Le sigue el sector de la construcción con una tasa de morosidad del 3,1 %. En la otra parte de la balanza se encuentra el sector de la metalurgia con un 1,9 % de cuentas incobrables.
Los impagos han aumentado de forma notable entre las pymes. Segmento que ha aumentado del 1,6 % (2018) al 2,9 % del año en curso. Mientras que para las grandes empresas el empeoramiento ha sido menos acusado, ya que se ha situado por encima del 2,7 % (2018, 2,3 %). En cuanto a las microempresas mantienen una gestión del crédito más prudente, ya que ha pasado de un 1 % en 2018 a un 1,4 % este año.