Según apunta el informe sobre crecimiento empresarial de CEPYME, que ha presentado Gerardo Cuerva, presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa, existen más de un centenar de regulaciones (fiscales, contables, laborales, financieras y de competencia) que dificultan que las empresas españolas ganen tamaño, lastran su competitividad y, en definitiva, frenan la recuperación de la economía, la creación de empleo y la sostenibilidad de las cuentas de las propias administraciones públicas a largo plazo.
Desde CEPYME consideran fundamental promover que la empresa española tenga el mismo tamaño que la media de la Unión Europea, lo que, según estimaciones del informe, permitiría crear cerca de 1,2 millones de empleos, aumentaría el PIB un 5,2 % y elevaría las exportaciones totales un 5,2 %. Además, según concluye el informe, equiparar el tamaño empresarial en España al de la media europea también elevaría las ventas de las compañías en 246.000 millones de euros de manera agregada, expandiría la masa salarial en 29.000 millones de euros e incrementaría la recaudación de impuestos en cerca de 20.000 millones sin tener que elevar los impuestos.
Desde CEPYME se recuerda que en la actualidad las empresas españolas intentan evitar, en especial, el escalón de los 50 trabajadores, ya que es donde deben asumir más cargas si amplían la plantilla, aunque sea con un solo trabajador más. Para evitar este problema, desde CEPYME se propone que el cumplimiento de las obligaciones por la ampliación de un trabajador en la plantilla no tenga carácter inmediato, sino que entre en vigor una vez consolidado este crecimiento, tras 4 años de aumentar y mantener su tamaño. Lo que facilitaría a la empresa su estabilidad para asumir las nuevas cargas y asegurar su tamaño.
Desde la Confederación se recuerda que el tamaño de las empresas afecta a la competitividad de todo el país, por lo que es importante fortalecerlo para evitar que sean tan vulnerables a las crisis, reducir su elevada mortalidad e incrementar su productividad.
Estableciendo una comparación con las empresas europeas, el informe desvela que mientras que en la empresa española trabajan 4,7 personas de media, una empresa británica emplea a más de 9 y una alemana a 12. En cuanto a la facturación, una empresa española media factura anualmente 1,1 millones de euros, lo que representa un 32 % menos que una empresa europea. El estudio también concluye que España no tiene un problema de emprendimiento; de hecho, en nuestro país nacen más empresas que en la UE de media, pero mueren muchas más. La Tasa de Emprendimiento (empresas creadas cada 10.000 habitantes) española se sitúa en el 35,3 %, siendo de las más altas de la UE, duplicando las que existen en Alemania, Holanda e Irlanda. Pero en el otro lado de la moneda, la tasa de mortalidad empresarial es más elevada que en otros países europeos de nuestro entorno. El 9,2 % de las empresas con asalariados acaba cerrando a lo largo del año en España, mientras que en la media de la Unión Europea se sitúa en el 8%.