Durante 2023 España recibió, según el Registro de inversiones exteriores DataInvex de la Secretaría de Estado de Comercio, una inversión extranjera de 34.178 millones de euros, cifra que supone un incremento de casi el 14 % con respecto a 2022 y la segunda mayor cantidad registrada desde 1993. Este incremento, que llega a pesar de los desafíos derivados de la pandemia y la situación geopolítica, sitúa a nuestro país como uno de los principales receptores de inversión extranjera tanto a nivel europeo como global.
“La inversión extranjera es un pilar fundamental para el desarrollo integral de un país proporcionando capital, tecnología, empleo y conocimiento”, ha comentado Yannick Charton, socio fundador de Valio Consulting. En cuanto a los resultados del pasado año, Charton ha asegurado que “subrayan el atractivo de España como destino de inversión a pesar de los desafíos económicos globales”.
Francia se sitúa como segundo socio comercial de España, ya que es el tercer mercado de destino de las exportaciones y, con más de 11 millones de viajeros en 2023, el principal país de origen de los turistas que visitan España. Además, los proyectos greenfield en España superaron los 44.560 millones de dólares y generaron, según FDI Markets, más de 96.000 empleos.
El 55 % de la inversión extranjera de 2023 fue a parar al sector servicios, donde destacan las actividades sanitarias, telecomunicaciones, programación e informática, mientras que más del 42 % a la industria. La construcción y el sector primario recibieron el 2,5 % y el 0,2 %, respectivamente.
Charton ha añadido que “estos resultados refuerzan la posición de España como un destino sólido y prometedor para las inversiones internacionales subrayando la importancia de un ambiente de negocios propicio y la gestión eficiente de los recursos”. Sin embargo, también hay retos y riesgos en el ámbito impositivo, por ello el experto de Valio Consulting ha recordado que “es crucial que España adopte una política fiscal equilibrada y competitiva para garantizar la sostenibilidad de las cuentas públicas, el crecimiento económico y la atracción de inversión.